En una edición más de este desafío del hombre y la máquina con la naturaleza, hubo una manifiesta ratificación de nombres y marcas en medio de polémicas e incertidumbres…

Por Bryan M.

La 44ª edición del Rally Dakar ha finalizado con el dominio aplastante del catarí Nasser Al-Attiyah en en la categoría autos con la única inminencia del francés Sébastien Loeb (BRX) en un año en el que Carlos Sainz (Audi) y Stéphane Peterhansel (Audi) completaron su travesía en el desierto con un coche híbrido.

Al-Attiyah fue el dominador de principio a fin sobre cuatro ruedas para imponerse su cuarta edición de la Dakar. Mientras que en la prueba de motos vivimos una montaña rusa de emociones con hasta cuatro cambios de líder hasta la victoria final alcanzada por el británico Sam Sunderland y la heroica exhibición del español Joan Barreda que consumó una cuarta ubicación con una clavícula fracturada desde la quinta etapa para pelear por la victoria final hasta la penúltima etapa.

Pero más allá de las clasificaciones finales, la edición de 2022 nos deja las críticas al “roadbook” lideradas por Carlos Sainz y secundadas por un amplio número de pilotos después de una primera etapa en la que el español se dejó más de dos horas; el director de la carrera David Castera tuvo que salir al paso de estas para explicar sus motivos y reconocer errores.

“Queríamos diseñar una ruta que respondiera a las exigencias de los competidores. El año pasado fue muy rápida, por lo que la idea principal era bajar la velocidad. Diseñamos etapas de tal manera que cada una contenga algo de la variedad de terreno que ofrece Arabia Saudí: montañas, dunas, pistas rápidas, caminos pedregosos”, recordó.

La otra gran polémica estuvo fuera de las dunas y los caminos de piedra y comenzó antes de que los motores comenzaran a rugir en Arabia Saudí con la explosión del vehículo del piloto Philipe Boutron que le causó heridas graves y le mantuvo en coma durante varios días.

El vehículo de Philipee Boutron explotó de forma repentina a unos 500 metros del hotel en el que se encontraba, cuando éste viajaba junto a otras cinco personas. Las autoridades saudíes calificaron los acontecimientos de “accidente”, mientras en Francia la Justicia abrió una investigación que ha asumido la Fiscalía Antiterrorista.

Por si no alcanzaba el desafío casi infrahumano de la competencia en sí, los organizadores resolvieron regresar a los caminos originales por los países árabes, sabiendo de antemano de los peligros que esto implica. Acaso no era más que suficiente el reto que ofrecía la carrera por los desiertos y montañas de Sudamérica…? Parecería ser que no, a pesar de lo poco aconsejable que significa competir en aquella geografía…